martes, febrero 13

Pequeña antipática gigante

Me pasó que desperté y vi una micro volcada sobre otra. Desperté a mi pinche gritándole que mirara lo que pasaba en la tv. Después de unos segundos, caí. Era un montaje. Así que seguí durmiendo.
Después, todo el mundo hablaba de la pequeña gigante.

Y yo no entendía por qué.

Nunca le encontré la gracia ni me llamó la atención. Es más, si alguien hablaba de ella, me enojaba porque se me aparecía en todas partes. Y esa manera estúpida que tenían los periodistas para hablar de ella, haciendo como que la cosa era cierta: “La pequeña gigante despertó de su siesta y sigue buscando al rinoceronte”. Y con eso estaban siendo “originales”, “dándole otra vuelta”, “periodismo diferente”.
Hace nueve meses que no tenía un fin de semana libre en Santiago. Fue un sábado de mucha flojera, anduve en onda zen, flotando por mi casa. El domingo me quise tomar un helado en el centro, que es muy agradable porque hay menos gente y el día estaba lindo. Pero oh, al llegar a Providencia con Salvador: taco. Largo y eterno taco. Era la gigantona esa. Media hora en llegar al centro. Por suerte el mono ese se había ido y la gente toda achoclonada ya se empezaba a dispersar.

Pero la mugre.

Los papeles.

Las botellas tiradas.

El camino a la casa de mi pinche se hizo más odioso que tratar de llegar al centro. Las calles, un basurero.
Gracias, pequeña antipática gigante.



Este es mi amigo Edu.
Le pasó algo parecido con la antipática ésta pero,
por lo menos,
al él pagaron.


miércoles, febrero 7

Teléfono

Llamé a un servicio del Gobierno. La persona por la que debía preguntar era Soledad. Como ya había hablado con ella otras veces, marqué su número directo. Al otro lado del teléfono me contesta una voz suave de mujer. Creyendo que se trataba de Soledad dije:
- ¿Aló, Soledad?
- No, Esperanza -me contestan al otro lado del teléfono. Extrañada, me quedé callada un momento e insistí:
- ¿Soledad?
- No, Esperanza, pero le doy altiro con Soledad.
- No, no se preocupe -dije rápidamente y corté.

Me puse a pensar, a pensar.